Sonidos que echamos de menos
Vamos a hablar de museos. ¡Pero de museos de sonidos!
No son pocos los sonidos que oímos cada día y apenas nos damos cuenta de que están ahí y forman parte de nuestro paisaje sonoro: el despertador, la ducha mientras alguien que vive contigo se prepara para ir al trabajo, el vecino que desayuna escuchando música a todo volumen (ese creo que soy yo...), la voz de la primera persona que escuchas cada día, la furgoneta que deja el pan en la tienda de la esquina cuando vas caminando al cole y muchos más que sólo tú conoces.
Pero aunque los conozcas... tal vez no eres consciente de ellos y tienes que concentrarte para recordar. Cuando los recuerdes, escribe en los comentarios tu nombre, curso y los sonidos que escuchas cada día en tu trayecto al colegio o al trabajo. Si has llegado a este blog pero no vas al cole, ni como alumnado ni como docente, no dejes de participar... preséntate y háblame de esos sonidos de tu día a día.
Cuando tengamos muchos participantes, publicaré los sonidos que compondrán nuestra colección de sonidos que echamos de menos. Además ésta actividad, que la puede hacer todo el mundo de forma voluntaria, ¡te subirá nota!
Nota importante sobre echar de menos.
Pero aunque los conozcas... tal vez no eres consciente de ellos y tienes que concentrarte para recordar. Cuando los recuerdes, escribe en los comentarios tu nombre, curso y los sonidos que escuchas cada día en tu trayecto al colegio o al trabajo. Si has llegado a este blog pero no vas al cole, ni como alumnado ni como docente, no dejes de participar... preséntate y háblame de esos sonidos de tu día a día.
Cuando tengamos muchos participantes, publicaré los sonidos que compondrán nuestra colección de sonidos que echamos de menos. Además ésta actividad, que la puede hacer todo el mundo de forma voluntaria, ¡te subirá nota!
Nota importante sobre echar de menos.
- Como es del verbo "echar", la "h" se echa fuera. Un ejemplo es "Yo te echo de menos".
- Cuidado con el verbo "hacer", que como indica nos obliga a hacer la "h". Un ejemplo es "Yo he hecho una tortilla muy sabrosa".
- Cuando echamos de menos algo es que nos habíamos acostumbrado a ello y nos hacía la rutina más cómoda y agradable pero ya no está. A veces las cosas vuelven, a veces aparecen cosas nuevas... Pero no echarás nada de menos si disfrutas de lo que hay a tu alrededor justo en este instante.
¡Hola! Soy Jesús de nuevo, voy a ser el primero en hacer el ejercicio que propongo en el vídeo para que sirva de ejemplo.
ResponderEliminarEl primer sonido cotidiano que he dejado de escuchar es la puerta de uno de mis vecinos. Casi siempre, cuando estoy bajando las escaleras para salir a la calle camino al cole escucho una puerta que se cierra. En otras ocasiones oigo la puerta del ascensor abrirse y, a veces, ambos sonidos uno después de otro.
Uno de los sonidos que más echo de menos es la voz de una compañera de trabajo. Antes de que lleguen las alumnas y alumnos a clase, estoy en el escritorio arreglando papeles o preparando la jornada. Suelo tener puestos los auriculares con música, pero flojito. De pronto, una voz desde la puerta me da los buenos días: es mi compañera Sara que tiene su aula junto a la mía.
Aunque hago algo de deporte en casa en estos días de confinamiento, echo de menos ir al gimnasio. No es que me guste mucho la música de allí y, aunque es motivadora, no suelo prestarle atención. Pero cuando suena el "pii" de entrada que indica que alguien llega a entrenar, sí que siento emoción: tal vez aparece algún conocido con el que intercambiar consejos... he hecho algunos amigos allí. iNo me había dado cuenta de esto hasta ahora mismo!
Estoy seguro de que hay más sonidos que echo de menos, pero ahora no caigo... ¡Volveré a comentar en lo que queda de semana!
Hola
ResponderEliminarHola, soy la teacher, hoy está lloviendo y casi no alcanzo a oír las gotas de agua caer. En mi casa, cuando era pequeña, mi habitación tenía una ventana que daba a un patio con un tejado de plástico duro. Yo oía la lluvia con la intensidad que caía al chocar contra ese tejado, y a mí me ayudaba a relajarme y dormir. Sentía el agua encima de mi cabeza. Ese sonido lo recuerdo cada vez que llueve, LO ECHO DE MENOS.
ResponderEliminar¡La confianza...! ¡Mira cuando contesto! Buena aportación, teacher. ¡Tenemos pendiente un friso sonoro! ¡Un abrazo!
EliminarHola!! Soy la mamá de Candela Atencia (2ºB).
ResponderEliminarLe he leído tus notas y pedido que me diga algún sonido que eche de menos.
Candela : Echo de menos el sonido del recreo.
Yo : ¿La sirena o música que anuncia que empieza el recreo?
Candela : No, echo de menos el bla,bla,bla (va alzando la voz) mientras tú hablas con tu amiga "pues mira bla,bla,bla..."(lo dice bajito)
Yo : ¿Pero lo echas de menos, es decir que te gusta ese sonido?
Candela : Pues claro porque significa que estamos rodeados de niños y que nunca te podrás aburrir.
Saludos
Hola, enhorabuena por la respuesta. Candela tiene una mente brillante y es muy sano que sea así de consciente del sonido del cole. Por otra parte, agradezco mucho la descripción de los matices "alzando la voz" ,"lo dice bajito". Muchísimas gracias por el aporte.
Eliminar¡Un saludo!